El sábado me volvía a casa después de una semana por tierras turcas batiendo el record de vueltas al estadio Ataturk, pero por la parte exterior. A las 4 de la mañana en pie para ir al aeropuerto tempranito. El taxi que vino a recogerme me hizo comprender que las leyes de tráfico no sirven para nada y que si en Izmir se aplicaran las mismas normas, en el poco tiempo de ir de mi hotel al aeropuerto, el conductor tendría el saldo de puntos en negativo e irrecuperables. Además el conductor era un virtuoso capaz de cometer varias infracciones a la vez.
De día, para meterle prisa al de delante, usan el claxon, pero por la noche, por respeto al descanso de los demás, solo usan las luces. Nada mas salir, un semáforo en rojo y el taxista echándole las largas al de delante para que se quitara. Se salta el semáforo en rojo y se mete en un giro prohibido. Sigue saltándose semáforos en rojo, uno justo delante de la Polis turca. Llamada al movil (¿a las 5 de la mañana?) y el chofer conduce con una mano mientras habla por la otra y sigue pasando semáforos en rojo y circular a unos 100 por zona urbana. Solo aminoró una vez, en una curva cerrada de 270 grados a la que habían colocado una valla de cemento por lo caro que era reparar la metálica diariamente. Pa habernos matao.
En el vuelo Estambul-Málaga coincido con varios turistas que vienen de regreso y un futbolista de rasgos árabes, calvo y con barba que al parecer ha fichado el Málaga, que viaja con la mujer y un pelota que debe ser el representante. Alguno se hace una foto con el, yo paso. Dentro del avión, el pelota del futbolista exigiendo a las azafatas que le pongan en clase business porque hay sitio libre y que tiene que estar el futbolista en 4 horas en Málaga y no puede viajar en turista. Mas o menos le dice eso. Hasta que llega uno de la Turkish y le baja los humos. Que si quiere ir en business, que lo hubiera pagado.
A la llegada al aeropuerto, mas forofos queriendose hacer fotos con el e incluso lo esperaban a la salida con fotografos y todo. Y yo saliendo por la puerta con el chandal de España y mis dos medallas de plata en la mano para enseñarselas a mis hijos mientras los forofos futboleros me miraban como pensando "¿y este quien es?". Al final me enteré que el futbolista es un tal Amrabat y que pasó de la gente y de la prensa porque su maleta tardó una hora en salir. Vamos, que la suya fue la única y yo no tuve que esperar lo mismo. Que asco de prepotentes furgoleros.
Al resto de los compis de los campeonatos los segui por la cutre camara web que ofrecía el directo en el estadio Ataturk. Vi llegar los 800 con mis conocidos ganando medallas alegrándome mucho por ellos.
De momento no me consta que haya muerto nadie en la maratón, así que parece suficiente. De los relevos, no salió el m45 de 4x400 por el tema de los vuelos y hubo algun cambio en la composición, pero veo que no hizo falta mi presencia en el lugar. Mi primera experiencia como delegado oficial la debo calificar como aceptable, sin incidencias, muy cansado por querer cubrir las actuaciones de todos, aunque debo dejar que se dediquen a ello los que están en puestos mas relacionados con el atletismo, como Marquina o Cortés.
Por mi parte 2 platas, mejorando mi actuación de hace 2 años con un bronce individual y una plata, así que contento a pesar de que creo que tenía opciones individuales claras para el bronce en los 20 kms.
Dentro de 3 años toca Aarhus, pero de momento la cuenta atrás ya está puesta para Torun dentro de poco más de 200 días. Campeonato a campeonato...
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