domingo, 13 de noviembre de 2011

D-Carrera solidaria contra el cancer (2ª parte)

Esta mañana el tiempo ha acompañado y se ha celebrado una prueba que no ha sido competitiva en la cual se ha notado que no ha habido muchos atletas federados porque he quedado bastante delante a pesar de hacer el recorrido marchando.
La prueba ha servido también para reivindicar cosas y mostrar logros personales. Por un lado había un señor con una prótesis participando y por otro esta niña con su familia lo cual hacen ver que estas pruebas participativas no sirven solo para recaudar dinero, sino para decir que ellos también están ahí y quieren participar.
Acabado lo serio, empezaré a dar caña a los domingueros. Por muy de Puerto Banús que se sea, no se puede ir a una carrera con unas gafas de sol "fashion" con las patillas doradas. Había una señora de más de 40 años con dichas gafas, un polo rosa de marca (que no recuerdo), un conjunto a juego, una sonrisa con dientes demasiado artificiales, ni una arruga en la cara y, creo que no debería decirlo pero era un detalle que confirmaba que había tenido algunos retoques, los pechos desafiaban a la ley de la gravedad antinaturalmente.
Otra conversación de una joven diciendo que tenía que comprarse un aparato de esos para medir las distancias porque cuando su novio le preguntaba le decía que había corrido 20 minutos, pero que él le insistía en saber cuantos kilómetros. La amiga le contestó que se tenía que bajar una aplicación para el iphone (¿se lo llevan mientras corren?) llamada runkeeper (yo no tengo iphone así que pongo de oídas).
El objetivo de mi participación era hacer un test de 3000 con compañía pero, al ver a estas señoras se me levantó el espiritu de humillar a los domingueros en la medida de lo posible y salí a todo trapo. Fallo porque pasé el primer kilómetro a 4:23, demasiado rápido, y noté falta de fuelle en el resto de la carrera porque no pude bajar más de 5 minutos el kilómetro. De hecho, sobre el kilómetro y medio, un poco antes de que me adelantara Toni, que no se que hacía tan rezagado, me adelantó un señor con un perro. Si, si, pero no veais el ritmo que llevaba el perro.
Al menos serví de liebre para algunos niños que iban fundidos pero tenían que salvaguardar su honor de que no les adelantara un tío andando. También fuí estímulo para hacer trampas por esta misma causa y algunos recortaron en ciertas zonas, espero que para evitar la humillación.
Muy contento con mi participación, algo menos con el test de 3000 (14:47 de paso de unos 3400 metros que podían ser 14:35-40), pero a la altura de la temporada que estamos no me puedo quejar.

3 comentarios:

  1. Una alegría verte Kiko, somos de esos amigos que conociéndonos desde hace 15 años sabemos que estamos ahí y un saludo cordial basta para refrendar nuestra amistad.
    Una buena mañana, era momento de pasar un buen rato y disfrutar en otras zonas de carrera inusuales para mi. Sali con unos amigos, en el mismo plan, tomando fotos y grabando videos, ya te pasaré el tuyo.
    El señor de la prótesis es Javi Mérida, triatleta local, campeón en temas internacionales del Europa y del Mundo tanto en Triatlón como en Duatlón en su categoría de minusvalía (perdió una pierna por encima de la rodilla en un accidente de tráfico. Además, es monitor de padel.

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  2. En una carrera solidaria, cualquier granito de arena cuenta y es importante, aunque sea con un polito rosa de marca, no crees?

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  3. Lo creo. De ahí que haya sido un acierto hacer la prueba en Puerto Banús donde hay gente que usa politos rosas para correr que puede dar mucho mas que esos 5 euros que era el donativo de la inscripcion. Espero que sus donativos fueran proporcionalmente superiores y que no hubieran ido a participar por el simple hecho de contarlo como anecdota en sus reuniones sociales.
    Yo hice unos 60 kilómetros por el mero hecho de participar, pero eso no es merito comparado con las 2 personas que menciono al principio de la entrada.

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