O-Misterios de Estambul

Si llegais a esta entrada buscando cosas maravillosas de Estambul, ya podeis ir a buscar a otro sitio porque aquí voy a hacer referencia a cosas que pasaran desapercibidas para la mayoría pero que tienen su importancia. La primera de ellas es que el islam se ha modernizado muchísimo, hasta el punto de que creo que los imanes usan el mp3 para difundir sus mensajes. En el hotel, a las 5 y media de la mañana, todos los días me despertaba el hijo de su madre con sus llamadas a la oración. Resulta que tenía una mezquita justo enfrente pero en el resto de 4 llamadas que se hacían a lo largo del día nunca veía a nadie subido a la torre. Sonaba como una saeta, así que no pasaría desapercibida en un concurso de "cante jondo". Al final localicé la fuente: un par de altavoces en el edificio de al lado de la mezquita, uno de los cuales estaba orientado para el hotel, para dar el mayor por saco posible a los clientes. En la foto se ve en lo alto del edificio el altavoz que iba dirigido para el otro lado.

En su descargo solo decir que hay sitios donde nos tenemos que comer las campanadas del reloj de la iglesia por la noche a pesar de las protestas de los vecinos. Claro ejemplo es en Guaro (Málaga) donde a un amigo le dijeron que eso es lo que había porque no se podía poner un controlador nocturno. Y es que las tecnologías con la iglesia... El segundo misterio que vi fue algo que me dejó asombrado. Con la gran cantidad de turistas españoles que va a Estambul y que a ninguno de ellos se le haya ocurrido trasladar la idea a España para forrarse. Se trata del bate-bidé. Es un bate como los de toda la vida pero que tiene incorporado un chorrito. En Finlandia había visto colocar una manguerita al lado, pero esto es el colmo de los inventos. ¿Cuanto espacio se podrían ganar en nuestros cuartos de baño para colocar otras cosas?¿Cuantos paseos estilo pingüino se podría ahorrar uno en esos desplazamientos hasta el sitio donde está ubicado el bidé? Imagino que los fabricantes de bidés tendrán las patentes compradas para que nadie les quite sus negocios al estilo de las petroleras con las patentes de los coches solares.

Y por último, el que más quebraderos de cabeza me está dando. Mirá que eramos bastantes matemáticos los que acudíamos al congreso pero ninguno fue capaz de solucionar la ecuación. Resulta que vimos en el escaparate de una tienda una camiseta que llevaba la siguiente fórmula rotulada.

Y aún paso las noches en vela intentando resolverla. Se que la integral de la exponencial es la propia exponencial más una constante, pero al ser la función de la izquierda dependiente de una variable elevada a un coeficiente, la constante debe ser 0. Pero a partir de ahí me quedo clavado y soy incapaz de despejar las 2 incognitas. Tenía que haber mirado la parte de atrás de la camiseta por si acaso había más variables o la solución. La cuestión está en que la gente se reía mucho al ver la camiseta, así que creo que los turcos tienen una capacidad matemática superior a la mía al menos.