jueves, 28 de julio de 2011

D-Atleta 2938

Ya queda menos de un mes para el que fue mi objetivo principal de la temporada y que al final se ha convertido en una prueba a la que voy por el simple hecho de que reserve los billetes de avión en su día.
Los juegos mundiales de policías y bomberos, mal llamados "olimpiadas" para mi gusto, se han convertido en un pozo sin fondo para sacarte dinero por la cara. Con la temporada tan buena (para mi nivel) que he realizado, incluso me parecen unos juegos de poco nivel, sobre todo en la prueba de marcha.
Lo último de esta gente es que te cobran por acreditarte, tanto a ti como a los que vayan contigo por temas "de seguridad". Si es por seguridad hazmelo gratis como en los juegos anteriores y no me claves 14 dolares por barba (o melena). La cosa nueva es que gracias a la acreditación he podido acceder a la página donde salen los inscritos provisionales y me he llevado una sorpresa mayúscula: solo somos 2 los inscritos en marcha en mi categoria.
El otro "marchador" se llama Oscar Rodríguez y creo que pertenece al C.A.Calella. Lo que he encontrado por internet es que es un tío que corre "un huevo" y me da miedo recordar el caso Florez, que también corría "un huevo" hasta que decidió pasarse a la marcha.
Mirando el lado bueno, si no me descalifican, puedo ser subcampeón del mundo sin esforzarme. De momento es provisional, pero ahí está la participación. En la categoría Master A, donde participan los amigos Solis y Peña, son 5 y uno de ellos es aquel que sale en los videos del campeonato marchando como las muñecas de famosa (esto es arcaíco así que los jovenes no lo entenderán).
En la orientación no he tenido tanta suerte y somos 15. Aún no se como voy a ir a la academia militar de West Point que está en la quinta puñeta, así que lo mismo ni participo.
Sigo con mis papers que estoy mas liado que la pata de un romano.

1 comentario:

  1. humm...
    interesante...
    tan solo...
    que no se dice "un huevo"...
    ...sino "un güevo"


    saludos,
    pepefdez

    ResponderEliminar